El juego de la oca de Mirano (Italia)

Juego de la oca

¿Quién no conoce el juego de la oca? Unos lo recordarán como un sencillo juego de mesa y otros rememorarán el concurso de televisión de los años 90 basado en él: con sus pruebas extrañas y los concursantes embutidos en chándales de colores chillones.

Pues bien: desde 1998 y durante el fin de semana posterior al 11 de noviembre (este año tocan los días 12 y 13) la principal plaza de la ciudad de Mirano (Italia) se convierte en un tablero gigantesco del juego de la oca: con sus 63 casillas de las que 13 hacen avanzar el juego más rápidamente y 8 de castigo que hacer perder turno o retroceder.

No sabemos si hay conexión con el programa de televisión antes dicho, pero desde luego la de Mirano es una actividad mucho más elegante. Pese a lo moderno de esta celebración los habitantes de la ciudad se visten al estilo de las últimas décadas del siglo XIX, cuelgan en las tiendas carteles de aquella época, se cuelgan viejos estandartes de los balcones, las calles se llenan de tenderetes antiguos… Si algún viajero despistado entrara en ese momento pensaría, entre el tablero y la apariencia, que ha viajado en el tiempo o se encuentra en un mundo semejante al de "Alicia en el país de las maravillas".

Para completar esa sensación antes del comienzo del juego, tiene lugar una carrera de ocas. En efecto, estas aves compiten como pudieran hacerlo caballos o galgos si bien es cierto que están menos predispuestas de lo que cabría esperar: a menudo se paran, echan a volar o retroceden convirtiendo del certamen en algo inesperado y muy divertido. Estas ocas serán las que más tarde serán colocadas en el centro del tablero gigante.

El juego en sí comienza la tarde del último día del festival. Hay 60 jugadores, vestidos de época, repartidos en seis escuadras: una por cada pueblo de la pedanía. El orden de salida de los equipos se decide cogiendo un número de una bolsa que hay en lo alto de una cucaña. Acto seguido comienza la partida, en la que los participantes actúan como las fichas: obedeciendo en todo momento los movimientos que les dictan los dados. La partida dura unos 90 minutos.

Los festejos no terminan con los homenajes a los ganadores del juego. Todo finaliza con la elección de "Miss Oca". No se trata de la muchacha más guapa del municipio, sino de la oca más bella de todas las que permanecieron en el centro del tablero.

Ya hemos dicho que es una fiesta muy joven, pero tras ver lo mágica, encantadora y divertida que es nos gustaría que se siguiera celebrando por los siglos de los siglos.

Artículos más leídos

Hemos realizado una selección de los artículos más leídos por los internautas de todas las secciones publicados hasta la fecha.

Otros eventos:

Contacta con nosotros