Brisbane, moderna y salvaje

Brisbane

Ya ha llegado el otoño, el invierno está un paso. Parece inevitable despedirse del buen tiempo pero pensemos… ¡En Australia ahora mismo gozan de la plena primavera! ¿Por qué no aventurarse, viajar hasta allí y, de paso, para aprender inglés? Uno de nuestros destinos está precisamente en la tercera ciudad más importante de la isla: Brisbane.

Se trata de una ciudad relativamente joven: fue fundada en 1824 como una colonia penal cerca de una aldea llamada Moreton Bay. En muy poco tiempo se convirtió en una ciudad próspera y en 1834 fue rebautizada como Brisbane en honor de Lord Brisbane, gobernador de Nueva Gales del Sur. Para 1854 la ciudad se convirtió en la capital del estado de Queensland aunque no consiguió el título de ciudad hasta 1902, al fusionarse veinte consejos municipales.

La ciudad tiene ese encanto común a la mayoría de ciudades australianas, en el que se funde el urbanismo moderno y la eterna naturaleza. Dos ejemplos de ello son el río Brisbane, que ha sido dragado para permitir la navegación de naves de gran calado y el monte Cootha, donde se encuentran un jardín botánico y un planetario. Por cierto, junto al monte hay una universidad, por lo que se trata de una zona de lo más animado.

Otras zonas de obligada visita en la ciudad son South Bank, con su playa artificial y sus zonas de bares y restaurantes; el West End, hippie y colorista; o Fortitude Valley, el rincón más fiestero de la ciudad. También hay otros lugares más tranquilos y literalmente más "naturales", como el Parque Nacional Lamington o el Australian Zoo. Ya sabéis que en Australia la fauna y la flora son un gran atractivo.

¿Cómo no visitar entonces este lugar, cómo no aprender inglés en él? Sin lugar a dudas se trata de un destino muy especial.

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